«Todo el mundo tenía que doblegarse y encontrar un
molde donde encajar. Doctor, abogado, soldado... no importaba lo que fuera. Una
vez dentro del molde tenías que seguir adelante. Sussex era un tipo tan
desvalido como cualquiera. O bien te las arreglabas para hacer algo o te morías
de hambre en la calle.»
viernes, 23 de octubre de 2015
jueves, 22 de octubre de 2015
Bajo la Piel
Anoche
vi Bajo la piel en Max Prime; una película con Scarlett Johansson como personaje
principal. Debo decirte que generalmente me gusta ver ese canal por la cantidad
de películas independientes que pasan a esa hora del día. Así que cuando la sintonicé,
influenciada más que todo por el horario, nombre y canal, me decepcione al ver
a Johansson como protagonista. Literalmente me dije: «No joda, otra maldita película
hollywoodense». Rápidamente me cerró la boca.
Etiquetas:
Alíen,
Alienígena,
Bajo la Piel,
Bondad,
Ciencia Ficción,
Extraterrestre,
Jonathan Glazer,
Maldad,
Max Prime,
Mica Levi,
Michel Faber,
Muerte,
Películas,
Reflexiones,
Scarlett Johansson,
Under The Skin
martes, 20 de octubre de 2015
La futilidad de la vida
A veces cuando reflexiono sobre la futilidad de la vida y cruzo miradas
con alguien, sé que esa persona está pensando que soy una amargada sin ninguna
meta en la vida; a la vez que yo pienso que es un pendejo. La vida es inútil,
sí. Lo que hacemos es inútil. Sé que todos andan por allí creyéndose
importantes, con grandes planes en la cabeza. Grandes sueños y metas. Como si
todo tuviera sentido para ellos. Así como dice Bukowski: «Como si todo el mundo supiera algo que yo desconocía». O quizá era
lo contrario. Yo sabía algo que ellos no. O sí lo sabían y se hacían los
pendejos. Quizá son mas inteligentes que yo y se dicen: «Al diablo, seguiré el ritmo de la marea porque si lucho contra ella me
ahogo». Una especie de hipocresía social. Sin embargo, decidiré que la
mayoría de ellos no lo sabe. No sé si sentirme superior o inferior por ello.
Bueno, al carajo, todos somos inferiores. Somos nadie. ¿Cómo dijo Rust? «Un títere biológico» y cuando los hilos
se cortan... todo se derrumba.
lunes, 19 de octubre de 2015
La Senda del Perdedor II
«Podía ver el camino que se abría
frente a mí. Yo era pobre e iba a continuar siéndolo. Pero tampoco deseaba
especialmente tener dinero. No sabía qué es lo que quería. Sí, lo sabía.
Deseaba algún lugar donde esconderme, algún sitio donde no tuviera que hacer
nada. El pensamiento de llegar a ser alguien no sólo no me atraía sino que me
enfermaba. Pensar en ser un abogado, concejal, ingeniero, cualquier cosa por el
estilo, me parecía imposible. O casarme, tener hijos, enjaularme en la
estructura familiar. Ir a algún sitio para trabajar todos los días y después
volver. Era imposible. Hacer cosas normales como ir a comidas campestres,
fiestas de Navidad, el 4 de Julio, el Día del Trabajo, el Día de la Madre...
¿acaso los hombres nacían para soportar esas cosas y luego morir? Prefería ser
un lavaplatos, volver a mi pequeña habitación y emborracharme hasta dormirme.»
Reflexiones sobre The Leftovers
The
Leftovers
es una serie que para muchos puede parecer indescifrable. Para mí no lo es. Cómo lidian las personas con la
inexplicable pérdida del 2% de su población… y con el hecho de que se puede
repetir en cualquier momento. De eso trata. Pero lo gracioso de todo esto
es que nosotros también perdemos una considerable cantidad de personas todos
los días de cada mes de cada año; y lidiamos con la pérdida y el temor a la
muerte todos los días de cada mes de cada año.
En la serie una forma de lidiar con
todo eso es creando cultos, los "Culpables
Remanentes" por ejemplo, o Santo Wayne por otro lado. ¿Dónde habré
visto eso antes?... Ya me acordé. ¡En la vida real! El Cristianismo, el
Budismo, el Islam, ¡Jesús! Las religiones sirven para eso, para sobrellevar la
muerte, para sobrellevar lo desconocido. The Leftovers no es una serie
sobrenatural o indescifrable. The Leftovers es nosotros sobrellevando la
perdida, es nosotros temiendo a la muerte, es nosotros volviéndonos religiosos,
y también es nosotros bloqueando todos esos pensamientos y actuando como si
nada pasara. En una entrada anterior escribí sobre mi incapacidad para ignorar
el final (la muerte). ¡Yo soy los
Culpables Remanentes! No hay un día en que no piense en todos los
asesinatos, genocidios, torturas y violaciones que ocurren cada segundo en
nuestro planeta; porque seamos claros, los que están bajo tierra no son los
únicos muertos. Muchas de las víctimas de violaciones y torturas constantes
(tanto físicas como psicológicas) no se diferencian mucho de los difuntos. Tu
vida acaba en el momento en que tu infancia termina, o al menos la buena vida.
Ella puede terminar a los 5 o a los 35. O puede no terminar nunca. Que suerte
la de esas personas.
Los culpables remanentes no saldrán
victoriosos en The Leftovers. Los que miran para otro lado sí. Aquellos que
actúan como si nada pasara. Como si lo que sucediera en los países árabes o
tercermundistas o hasta en la casa del vecino ocurriera en otra dimensión, en
un universo paralelo. ¿Y porque te digo que ellos ganarán?... porque la única manera de que la humanidad
sobreviva es ignorando nuestra mortalidad… y las implicaciones que ella
conlleva.
El
mundo seguirá girando,
los Culpables Remanentes seguirán recordando, siendo despreciados e ignorados;
otros seguirán idolatrando, a un nuevo Wayne, a un nuevo Tommy; y otros
seguirán con sus vidas sin permitir que la sensación de pérdida o fatalidad los
toque sólo hasta el momento en que sea inevitable.
domingo, 18 de octubre de 2015
La Senda del Perdedor
«El problema era que tenías que seguir
escogiendo entre lo malo y lo peor hasta que al final no quedaba nada. A la
edad de 25 la mayoría de la gente estaba acabada. Todo un maldito país repleto
de gilipollas conduciendo automóviles, comiendo, pariendo niños, haciéndolo
todo de la peor manera posible, como votar por el candidato presidencial que
más les recordaba a ellos mismos. Yo no tenía ningún interés. No tenía interés
en nada. No tenía ni idea de cómo lograría escaparme. Al menos los demás tenían
algún aliciente en la vida. Parecía que comprendían algo que a mí se me
escapaba. Quizás yo estaba capidisminuido. Era posible. A menudo me sentía
inferior. Tan sólo quería apartarme de ellos. Pero no había sitio donde ir.
¿Suicidio? Jesucristo, tan solo más trabajo. Deseaba dormir cinco años, pero no
me dejarían.»
'Cause we hunt you down without mercy. Hunt you down all nightmare long
Tuve un sueño extraño hace días,
semanas quizás; digo extraño porque fue muy realista y porque sentí una especie
de terror visceral. Yo estaba hablando con mi abuela, no recuerdo que. En un
lugar que era como una especie de consultorio. Abuela luego se va, a hacer algo
o a buscar algo o que se yo, los sueños siempre parecen ir en dos direcciones a
la vez. Ella va alejándose, caminando por una especie de maizal o un lugar
donde había unas hierbas muy altas, tan altas como una persona, y a punto de
secarse. Un lugar terrorífico; creo que lo vi en una película de terror, pero
no recuerdo el nombre. Era sobre un demonio volador que andaba matando por allí
y hacia armas y otros artefactos con dientes, huesos y otras partes del cuerpo
de sus víctimas. No evoque la película en ese instante, la estoy evocando
ahora.
El caso es que abuela se fue por allí y
yo tenía un mal presentimiento, uno muy malo. Como si supiera que le iba a
pasar algo malo allá en el maizal o adonde sea que fuera. Tenía miedo por ella,
una anciana que siempre ha ido por la vida, por la ciudad sola, a pesar de que
casi no puede ni caminar; es más fuerte de lo que parece. Regreso al
consultorio, asustada, y... (No sé si era un consultorio, parecía una especie
de parada de autobuses en el interior de un pequeño cuarto; extraño) entro y
allí están dos de mis tías. Estoy asustada, y le digo a mi madre, que también
se encontraba allí (no recuerdo si con mis hermanas), que abuela se fue y que
hay que ir tras ella. Luego me apoyo frente a una especie de mostrador que
había en una pared y una de mis tías se me acerca por detrás, me aprieta
fuertemente un costado y me susurra al oído, con una voz terrorífica que
parecía venir del mundo de los despiertos, algo que no recuerdo pero que ahora
por alguna razón parece importante recordar. Quizá no era nada, solo sonidos extraños
y macabros (quizá mi mama hablaba en sueños o con mi hermanita pequeña mientras
yo dormía). Sentí una fuerte sensación terrorífica pasar de mi costado, donde
mi tía me presionaba fuertemente haciendo que me doblara, hasta mi nuca donde
sentía su aliento, y desperté... con un puyazo doloroso en mi costado, debido a
la forma en que me dormí quizá. Fue extraño el sueño. Probablemente por la
sensación de estar atrapada entre el mundo de los sueños y el mundo real.
Aunque quien puede asegurar que los sueños no son reales. Se sienten muy reales
a veces.
Por otro lado, ya he soñado dos veces
estas últimas semanas, sobre irme con alguien, montarme en una moto o en una
camioneta roja que no recuerdo donde vi despierta, y simplemente dejarme llevar
a merced de esas personas que creo conocer y en quienes creo confiar (soy muy
confianzuda en esa parte de los sueños), para luego darme cuenta, cuando ya
estoy algo lejos de la seguridad de mi hogar y familia, que probablemente me
llevan a un lugar lejano para hacerme cosas malas (en el caso de uno de los
sueños, le pregunto al tipo que va manejando hacia dónde vamos y confirma mi
terror... me llevan a hacer de puta (“de puta” es como endulzar la cosa, no
creo que fueran a pagarme) en un motel barato. Venían varios hombres en el
auto, incluido un adolescente, que probablemente evoqué de
"Apocalipsis", un libro de Stephen King. ‘’Joe’’ le decían al niño,
él no hablaba). Luego despierto, asustada e inquieta por no poder librarme de
ellos en el sueño, por no haber conseguido escapar antes de despertar. Es como
si fuera importante que el sueño terminara bien, por el bien de mi cordura.
sábado, 17 de octubre de 2015
Las mejores frases y diálogos de True Detective
Ya hace tiempo que terminó la segunda
temporada de True Detective, y honestamente no se puede comparar con la
primera, que para mí fue una obra maestra. Quizás eso se deba principalmente a
que me identifiqué mucho con el personaje de Matthew McConaughey, Rustin
"Rust" Cohle. Ademas de las grandiosas interpretaciones, la serie
está colmada de estupendos escenarios y ni hablar de la atrayente historia.
Es por ello que decidí escribir una
entrada con mis frases y diálogos favoritos de la aclamada primera temporada, y
aquí los tienes:
What i need is a good defense, cus’ i feeling like a criminal
Es
una nueva etapa en mi vida.
Me despidieron de mi (tedioso) trabajo. Por un lado me sentía triste, quizá un
poco deprimida. Por el otro me sentía feliz de ya no tener que seguir con la
rutina de pararme a las 6, hacer almuerzo y esperar carrito por media hora,
para luego comenzar con lo tedioso que es socializar con personas que te caen
mal o que te valen mierda. Odiaba ese trabajo y la paga era horrible. Me di
cuenta que si quería vivir bajo esas reglas sociales (ya sabes, estudiar,
trabajar, formar familia, esperar ansiosamente ese mes de vacaciones y luego
volver al trabajo, un trabajo aburrido) iba a ser miserable. Creí que podía
vivir bajo la norma de si no te gusta
haz que te guste. Pero jamás lo intente, ni lo quise hacer. Tan solo no
veía a mí ‘’espectacular y sobre desarrollada’’ mente (jajá) hacer lo mismo una
y otra vez mientras moría por dentro, hasta que solo quedaba ese vacío, un clon
de todos los demás, un títere de la sociedad. Pero al fin y al cabo, que
importa. Todos terminamos en la tumba ¿no?, bueno algunos terminan en lugares
peores o mejores, depende de cómo lo veas. Es como si no valiera la pena,
trabajar o no trabajar. Osea, nada importa. Al fin y al cabo, es mi vida, puedo
hacer lo que me dé la puta gana ¿no?
En este punto de mi vida solo quiero
vivir bajos mis reglas, rodeada de las personas que quiero, soportando lo mejor
posible a las personas que no. Sí, eso es lo que quiero. Tan solo sentir que transito la carretera al
infierno sin que nadie me imponga el límite de velocidad, ya sabes, a mi
ritmo. ¿Me van a despreciar por eso? Sí. ¿Me van a tratar como alguien extraño
y loco, como alguien deprimido que necesita ayuda psicológica? Ya lo hacen. A
veces pienso si es buena idea visitar un psicólogo. Pero honestamente, si lo
hago es porque buscaría su aprobación o su admiración. Aunque la verdad es que
deben haber miles de personas que piensan igual que yo. ¿Qué debo hacer
entonces? Vivir bajo mis reglas.
Pero, lo que me preocupa es como sobrevivir si vivo así. Tarde o temprano mi
madre se cansará de mantenerme. Porque la verdad no me veo haciendo un coño,
solo escribir quizá, y es muy ilusorio pensar que seré una especie de Edgar
Allan Poe reconocida en vida o un Charles Bukowski con tetas.
Puedo
ser buena, lo sé, puedo ser muy buena o muy mala, todo está en mi cabeza. Pero entonces recuerdo el final, lo
que se avecina, y todo pierde importancia. Escuche en un documental que de vez
en cuando el ser humano visualiza ese momento final (la muerte, dah) y de
alguna forma se deprime por ello, así que lo que de verdad le permite al hombre
seguir viviendo normalmente, como una persona ‘’sana’’, es el bloqueo de ese
momento final, de ese pensamiento. Pero hay otras personas que no pueden
bloquearlo, esa visión siempre está allí. ¿Imaginas lo que debe ser vivir así?
Bueno, pues así vivo yo, siempre. Supongo que es lo mismo que sufrir de
depresión, el mismo sentimiento. Pero recuerdo haber leído que no hay nada de
malo en sentirse así. Osea, ¿Por qué todo se reduce a la búsqueda de la felicidad? ¿Por qué no simplemente aceptamos y abrazamos nuestras emociones?
Todas ellas. No vivamos en un mundo que constantemente busca la
"perfección" sin siquiera saber qué es eso. Aceptémonos tal como
somos, completamente imperfectos y defectuosos, porque al fin y al cabo seguimos
funcionando y porque por alguna razón las más grandes mentes también eran
mentes trastornadas.
Etiquetas:
Aceptación,
Charles Bukowski,
Depresión,
Edgar Allan Poe,
Felicidad,
Fiona Apple,
Muerte,
Perfección,
Pesimismo,
Reflexiones
¡Saludos!
Este blog/diario tratará sobre
cualquier cosa que me interese, sobre cualquier opinión que quiera expresar, sobre cualquier historia que quiera contar.
Me responsabilizo (obviamente) por
cualquier opinión que pueda herirte o molestarte, por cualquier error
ortográfico o gramatical que cometa; no soy escritora, aunque quiero serlo.
Escribir este blog es el primer paso para lograrlo.
Si te tomaste el tiempo de leer esta
bienvenida y cualquier otra entrada, ¡GRACIAS!
Bienvenido/a a: "El
Diario de Koro".
Suscribirse a:
Entradas (Atom)